El Refugio de Morgan en Sagua La Grande

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Uno de los refugios de Henry Morgan, Cayo La Yana Jurisdicción de Sagua La Grande, antiguo Territorio Indio Sabaneque.

A solo 2,5 millas náuticas al nordeste de la Playa “La Panchita” se encuentra el Cayo “La Yana”de 4 kilómetros de extensión situado en parte dentro del Cayo Mosquito y allí la tradición localiza el entierro de una botija con monedas antiguas que muchas generaciones de sagüeros han buscado sin resultado alguno.

Pero si la leyenda de la botija resulta interesante,más aun lo es el hecho que este sitio fue por largo tiempo la residencia o Cuartel General del temerario pirata Henry Morgan desde donde planeaba sus zafarranchos de combate a los galeones de la corona que viajaban repletos de oro hacia el viejo mundo y cuya ruta obligatoria lo era el Canal de San Nicolás al norte de la cayería de Sagua La Grande.

Nunca sintió más temor el marino español que cuando pasaba por esta siniestra zona del norte de Las Villas y nunca pudo encontrar un corsario o pirata un sitio más ideal y estratégico que estas trampas o escondites naturales que presentaban estos cientos de islotes llenos de recovecos y canalizos muy difíciles de dibujar a plenitud en una carta náutica.

Aquí también existía la ventaja de que la llamada “Boca de Sagua” conducía al río más cauloso de toda la costa norte de Cuba por donde podía navegarse más de 30 kilómetros corriente arriba en medio de un bosque tropical densamente tupido que conducía al corto camino carretero hacia las Lomas del Mogote o Mogotes de Jumagua con amplias cuevas donde pasar los horribles huranes del caribe y enterrar, según leyendas, sus fabulosos tesoros.

La guardia española siempre le temió al Cayo La Yana y sus alrededores ya que Morgan tenía muy bien distribuídos a sus sentinelas y se hacía muy dificil transitar esta zona sin perder la vida.Existe un viejo documento del Cabildo de Remedios donde se habla de una incursión que el propio Henry Morgan hizo a Sagua La Grande donde saqueó todas las crías de ganados que tenían los primeros pobladores madereros del “embarcadero”, nombre que se le daba a Sagua por aquellos tiempos.

La leyenda de la botija de La Yana pierde valor ante la leyenda de la guarida de Morgan teniendo en cuenta que nos referimos a uno de los seres más sanguinarios y temidos que existió en la época del corso y la piratería de nuestros mares sagüeros.

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ARCHIVO SABANEQUE

1970 - 2009

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El Galeón descargado en Cayo Cristo

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Pasemos al siglo XVII donde otra vieja anécdota describe que en Cayo Cristo estuvieron por más de 48 horas, dos bergantines piratas y un galeón español del cual descargaban toda su fortuna a la vista de otros barcos que por allí pasaban rumbo a Sagua que por esa época le llamaban “El Embarcadero”.

Enterada la marina española de tal acontecimiento, envió al sitio a 4 grandes fragatas de guerra que cañonearon a la flota pirata cuando ya llevaban una hora alejándose del Cayo.

Los tres barcos fueron hundidos pero cuando los españoles exploraron tierra con el objetivo de desenterrar el tesoro, no encontraron ni una sola pista que les descubriera el punto de enterramiento.

Los piratas, muy experimentados en limpiar huellas, habían dejado el terreno en su perfección natural sin la más diminuta marca o señal que sugiriera un eslabón del derrotero.

De esta forma ha quedado para siempre, sepultado en Cayo Cristo, el secreto del galeón descargado.

Hay que señalar que durante la primera mitad del actual siglo (XX), se hallaron unos cañones en el punto llamado Los Caletones, que tenían una inscripción de 1612 y todo apunta hacia un barco pirata; de todas formas, de no serlo, estos cañones sí indicarían la notable actividad que ya existía en este Cayo por el lejano 1616 o algo más.

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El incendio de 2007

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GRANDES INCENDIOS DE LA VILLA DEL UNDOSO
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EL INCENDIO DE 2007 EN LA CALLE CESPEDES

-Este incendio ocurrió el 30 de Diciembre de 2007 a las 10:30 de la mañana en las casas de la calle Céspedes # 56, 58 y 60 entre Gonzalo de Quesada y Carrillo.

La casa más afectada fue la número 58 de la señora Berta la cual se quemó completa; las casas de ambos lados se quemaron parcialmente.

-Fotos del siniestro:

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Para ver historia de incendios en Sagua La Grande ir al Website:

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El primer largo metraje del cine cubano, 1909

PRIMER FILME DE FICCION EN CUBA

“La Leyenda del Charco del Güije”

Pertenece a Sagua La Grande el record de haberse filmado aquí en 1909 el Primer Largo Metraje en la historia del cine cubano, cuando la empresa de Don Chas Prada produjo una fascinante historia de romance-ficción en el sitio del Charco La Palma donde vive la criatura del Güije...

Todo comenzó cuando el Gerente de la "Metropolitan Co." Don Chas Prada, llega a Sagua La Grande el 5 de Marzo de 1909 con un guión cinematográfico y se entrevista con el proyeccionista del Teatro Uriarte Don José Antonio Trespalacios que es el padre de Avelino y abuelo de nuestro colaborador Pablo Lauries (Pachy), para discutir la posibilidad de “filmar una película de ciencia-ficción” en Sagua La Grande .

Con gran entusiasmo Trespalacios aceptó la brillante e innovadora idea y se encargó de buscar a los actores que trabajarían en el filme y finalmente el elenco quedó conformado por los sagueros: Don Rosendo Reyes (el popular Melitón) que en la película actúa como el novio de Doña María Teresa Navarro; Don José Fabre Rueda (hermano del gran músico Antonino Fabre) con el papel de cazador; Trespalacios como galán que invita a bailar a la jóven, Don Juan Olivera que hace de turista; y Nena la hija de Chas Prada que aparece como amiga de la novia, entre otra gran cantidad de vecinos de los alrededores del Charco del Gúije y un conjunto de música campesina que ameniza el ambiente compuesto por los cantantes: Don Juan Ruperto Delgado Limendoux y Don Alfredo Ibáñez; en el güiro: Don Francisco (Pancho) Picasso; laud: Don Rosendo Fundora.

Todos estos actores trabajaron voluntariamente en la película. La película mostraba una gran fiesta o guateque campesino en el rancho del “Charco del Gúije” con la asistencia de numerosos vecinos que disfrutaban del conjunto musical y de un sabroso lechoncito asado.

En medio de todo aquel alboroto, la cámara se concentra en un jóven que insiste en bailar con una bella muchacha, pero esta no aceptaba hasta que después de mucho rogar el jóven logra convencerla y la estrecha entre sus brazos. El novio de ella,que era muy celoso, había prometido matarla si la encontraba con otro y apareció en escena con un revolver en mano decidido a cumplir con su promesa.pero un cazador que llegaba en el momento desde el río Sagua lo detiene con dos disparos de su rifle.

El novio, fatalmente herido, corre hacia el Charco del Güije seguido por todos los asistentes de la fiesta y al llegar a la orilla trata de disparar a la multitud pero un tercer disparo del cazador lo inmoviliza definitivamente y su cuerpo cae en las oscuras aguas donde desaparece en la profundidad dejando detrás una gran mancha de sangre.

El cuerpo del novio celoso entonces se trasforma en un desagradable monstruo al cual los sagüeros llaman “el güije”.

La película se estrena en el Teatro Uriarte el 2 de Mayo de 1909, teniendo Sagua por tanto la primicia de exhibición pues Don Chas Prada pudo haberla estrenado en La Habana, pero el pueblo sagüero estaba eufórico por ver esta producción local y el productor determinó que la Villa del Undoso se merecía este privilegio.

De esta forma la cinta se mantiene en cartelera por 4 semanas ya que la demanda era descomunal e interminables filas rodeaban el Teatro Uriarte (luego Principal) pagando 50 centavos que era bien caro para la época (teniendo en cuenta además que eran solamente 10 minutos de cinta) y “muchos adinerados, incluso, la repitieron.

En toda la ciudad no se hablaba más que de “La Leyenda del Charco del Güije” pues el acontecimiento era una especie de unión de orgullo local con novedad tecnológica si se tiene en cuenta que el cine era aún muy jóven. El proyeccionista del teatro Don Antonio Trespalacios caminaba orgulloso entre la multitud de espectadores que lo felicitaban como co-productor y proyeccionista de la obra, pero además por su naciente fama de actor con papel positivo en la película, en cambio (según memorias de Avelino) la multitud abucheaba por las calles a Melitón “que era el malo de la película” y también aplaudían a Fabre el cazador que lo mató.

Su productor Don Chas Prada quedó muy satisfecho con la gran fortuna que le reportó aquel estreno en Sagua La Grande y decidió entonces exhibirla por muchos teatros de Cuba, Estados Unidos y España.

En la actualidad este rollo se halla desaparecido, pero siempre tenemos la esperanza los sagueros, que cualquier rincón de Sagua, de Cuba o del mundo, pudiera darnos la sorpresa, como nos ha sucedido con otras cintas, fotos o documentos que ya se creían desaparecidas para siempre. Ojalá que el destino nos tenga reservada esta otra sorpresa, pues “La Leyenda del Charco del Güije” constituye una verdadera joya de la cinematografía cubana.

Curiosidades de Sagua La Grande

Pedro Suárez Tintín 1978

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La Cueva del Diablo

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También conocida como: "La Cueva del Gas" o "Cueva de Brito".
(Diario de Exploraciones)
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"El 17 de Agosto de 1985-“Apareció de pronto más allá de Caguagua Laportilla una cueva fuera de lo común dentro de la antigua finca de Brito el cual, según la leyenda, escondió toda su fortuna (bastante grande por cierto) dentro de una cueva que luego tapió."

"Se habla de su gran inteligencia y algunos campesinos opinan que la cueva que ha aparecido posee una atmósfera envenenada a propósito por este señor para proteger su tesoro."

"Lo cierto es que unos cazadores de jutías (según dicen unos) fueron los que localizaron una tapia de hierro cubierta de piedras y al destaparla comprobaron que un gas insoportable se desprendía del boquete."

"La noticia llegó en el acto a nuestros oídos (en Sagua) y sin pérdida de tiempo nos trasladamos hasta la zona, un área por lo general llana con pequeñas elevaciones donde pasta el Ganado (algunos dicen que ya campesinos de la zona la habían descubierto al cruzar con el Ganado en busca de caminos, pero mantuvieron el silencio)."

"En una de estas elevaciones o montículos se encontraba la cueva en cuestión."

"Trasladamos el equipaje hasta la misma y planeamos el descenso…”

(Hasta aquí la nota de mi diario tal y como lo escribí ese mismo día que apareció la que llamo “La Cueva del Gas” y que algunos creen que coincide con la vieja leyenda de Brito).

Nos cuenta la tradición de la zona que el señor Brito poseía una gran fortuna pero que además “se trataba de un guajiro muy culto” que había dejado dicho entre su familia que su fortuna la protejería una “trampa” muy sofisticada que nadie podría vencer.

Por muchos años todo fue puro mito, pero aquel 17 de agosto los espeleólogos nos encontrábamos ante un descubrimiento nuevo para Sagua. Una cueva con atmósfera irrespirable había aparecido.Para los soñadores “la cueva de Brito había aparecido”. Todo coincidía aunque nosotros aún no lo queremos confirmar. No lo queremos admitir.

Oficialmente la narración la hicimos por primera vez en la revista “El Undoso de la ciudad de Miami, Florida, U.S.A. -agosto-1987, dos años después del descubrimiento de la cueva.”.

“Con el nombre de “Cueva del Gas” bautizamos a una interesantísima cueva existente cerca del poblado de Caguaguas en los terrenos de la Antigua finca de Brito.

"Los más románticos prefieren llamarle “Cueva de Brito” o “Cueva del Tesoro” debido a que la tradición cuenta “que este señor escondió todos los ahorros de su vida en un lugar donde nadie podría penetrar y el que lo lograra no duraría mucho tiempo”.

"Sea cierta o no esta leyenda,el asunto es que en el corazón de esa Antigua finca (en la actualidad un inmenso aromal) encontró fortuitamente esta cueva un campesino que habría paso entre la espesura buscando nuevos caminos para su Ganado.La cueva estaba tapiada con troncos y piedras y la vegetación se había encargado del resto."

"La curiosidad no tardó en apoderarse de los vecinos más inmediatos como tampoco tardó en aparecer la primera víctima de la diabólica cueva;su atmósfera resulta completamente irrespirable, pudiera decirse que está ocupada por un gas venenoso al punto de que en su interior no prolifera ningún organismo.”La vida en su interior es CERO”.

"El descenso es imposible por debajo de los cuatro metros de su entrada.Este nivel se encuentra muy bien delimitado,lo que se puede comprobar introduciendo una antorcha por debajo del mismo la cual se apagará esta línea invisible.Lo mismo sucede si se lanzan pompas de jabón,pues se observa el curioso fenómeno de que estas se mantienen flotando en el nivel donde comienza la dañina atmósfera.
Las características de ese gas coinciden con el Dióxido de Carbono pero en realidad la geoquímica de dicha cueva en nada explica el origen del supuesto CO2.Poco se sabe de lo que allí ocurre."

(Diario) "Tuve la gran oportunidad de ser el primero en recorrerla en toda su extensión con una escafandra de buceo.En mi descenso pude confeccionar el croquis (preliminar) de esta rareza espeleológica,el cual ha permanecido inédito hasta este momento en que nuestro querido boletín “El Undoso” lo saca a la luz por vez primera… (1987)”

nota: Con la ayuda técnica de Albertico Santana y Fidel Vila tuve la oportunidad de rastrear esta cueva con detector de metales sin resultados positivos.Luego con Alfredito ocurrió un raro fenómeno de “Coincidencia” que en otro momento contaré".

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Un galeón completamente descargado en Cayo Cristo

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ENORME TESORO AUN TRAGADO POR EL CAYO

Pasemos al siglo XVII donde otra vieja anécdota de las calles de Sagua La Grande la cual describe que en Cayo Cristo estuvieron por más de 48 horas, dos bergantines piratas y un galeón español del cual descargaban toda su fortuna a la vista de otros barcos que por allí pasaban rumbo a Sagua que por esa época le llamaban “El Embarcadero”.

Enterada la marina española de tal acontecimiento, envió al sitio a 4 grandes fragatas de guerra que cañonearon a la flota pirata cuando ya llevaban una hora alejándose del Cayo.

Los tres barcos fueron hundidos pero cuando los españoles exploraron tierra con el objetivo de desenterrar el tesoro, no encontraron ni una sola pista que les descubriera el punto de enterramiento.

Los piratas, muy experimentados en limpiar huellas,habían dejado el terreno en su perfección natural sin la más diminuta marca o señal que sugiriera un eslabón del derrotero.De esta forma ha quedado para siempre,sepultado en Cayo Cristo,el secreto del galeón descargado.

Hay que señalar que durante la primera mitad del actual siglo (XX), se hallaron unos cañones en el punto llamado Los Caletones, que tenían una inscripción de 1612 y todo apunta hacia un barco pirata; de todas formas, de no serlo, estos cañones sí indicarían la notable actividad que ya existía en este Cayo por el lejano 1616 o algo más.

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Las peluconas de Cayo Cristo - Año 1567

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UNO DE LOS MUCHOS TESOROS DE CAYO CRISTO,

JURISDICCION DE SAGUA LA GRANDE, CUBA.

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Muchas historias de piratas giran alrededor de este amado cayo de los sagüeros a lo largo de los cuatro siglos de conquista y colonización española de Cuba.

Si nos guiamos por las leyendas,“tantos piratas y corsarios enterraron aquí sus tesoros en diferentes épocas, que la ley de la probabilidad nos indica que alguno habrá encontrado el tesoro de otro cuando trataba de enterrar el suyo, si tenemos en cuenta el área relativamente pequeña del islote”.

La misma ley enuncia un pequeño porciento para que esto no suceda, en cuyo caso tendríamos los sagüeros un paraíso repleto de cofres, lingotes y toneles a cada paso que diéramos por su superficie.

Cada vez que tratamos de recopilar historias de tesoros con los viejos pescadores de Isabela (1977), un alto porciento de ellos ubican los entierros en Cayo Cristo y quizás la segunda y lejana posición la ocupe El Esquivel.

Pero los relatos más lejanos provienen de la Sagua colonial cuando aún no existía Isabela de Sagua y se hablaba de que una gran colonia de retirados hermanos de la costa allí se había establecido para olvidar su antiguo pasado delictivo y disfrutar así de sus jugosos ahorros productos de la piratería.

De la época de esos “retirados” nos llega la historia de una enorme fortuna compuesta por 10 ó más toneles repletos de peluconas de oro enterrados en 1567 en Cayo Cristo y que ellos mismos buscaron cuando ya vivían en Sagua en 1750 sin obtener resultados positivos.

La tradición no cuenta cómo ellos sabían de aquel lejano entierro, pero el simple hecho de haberse preocupado por ir a buscarlo, indica la solidez de sus datos…

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La corona de la reina perdida en Sagua

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UNA CORONA PERTENECIENTE A LAS JOYAS DE LA

REINA ISABEL SEPULTADA EN MALPAEZ, LAS VILLAS,CUBA.

Pertenece a los “Tiempos de Leyenda” una vieja corona que fue robada a la realeza (Reina Isabel) la y fue a parar al Nuevo Mundo. Por mucho tiempo se trazó todo un plan de búsqueda en América ya que se hacía primera prioridad encontrar esta vieja joya del imperio,pero a pesar de todo el esfuerzo realizado,el valioso tesoro nunca pudo ser encontrado.

Muchos años después apareció la noticia en una remota Villa llamada Sagua La Grande donde se había acabado de capturar al bandido más preciado de todos los tiempos. El llamado Pepe Cucaque tanto dió que hacer al gobierno español de la región norte de Las Villas.

Se dice que capturado e interrogado este legendario sujeto, confesó, entre otras cosas,que latan buscada corona española era parte de su propiedad y la había sepultado en una cueva de la finca “La Jutía” en la zona de Malpáez.

En su escuetas declaraciones agregó además que esa pieza había llegado a Cuba a manos de los piratas y que él la había comprado por una suma muy respectable, pero que hasta ahí llegaría su declaración pues ese dinero lo necesitaba para su próxima vida en el más allá y de ninguna forma iba a revelar los tantos sitios de sus tesoros.

Al final, Pepe Cuca fue ejecutado por temor a que fuese rescatado por los tantos bandidos que componían su cuadrilla, y con su muerte se fue el secreto de la real corona, sepultada en algún lugar de las Lomas del Mamey…

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