Escrito por un biznieto de Carmen Ribalta y León
Tomás “RIBALTA” y Serra (1812-1887)
Los hermanos José, Pablo Luis y Tomás Ribalta Serra dejaron su querida Cataluña para buscar en Cuba mejores oportunidades de vida que la que tenían en Sitges como pescadores. La partida ocurrió a finales de la década de 1820 y fueron a establecerse en el entonces Departamento Central de la Isla de Cuba – José y Tomás en Sagua la Grande y Pablo Luis en Santa Clara. José Ribalta Serra se casó en Sagua la Grande en 1831 con Angela de León y Costa. Tuvieron dos hijas: Marina y Carmen. Tomás Ribalta y Serra fundó en 1836 el ingenio “Santa Teresa” en las proximidades de Sitiecito. Al morir José en el comienzo de la década de 1840, su viuda e hijas quedaron en difícil situación financiera y, al poco tiempo, Tomás se casó con su cuñada Angela – con quien no tuvo descendencia y sus sobrinas se volvieron hijastras a las que trató como hijas propias. Mas tarde Tomás (1) adquirió en 1862 el ingenio “El Consejo,” situado cerca de Sitio Grande, y le cambió el nombre para “Santo Tomás,” (2) se fué de Sagua la Grande en 1870, al comienzo en Cuba de la Guerra de los Diez Años, para vivir en Barcelona pero su esposa Ángela no lo acompañó puesto que se quedó en la “Villa del Undoso” con sus hijas Marina y Carmen, (3) heredó la fortuna azucarera y bienes inmuebles de su hermano Pablo Luis cuando este murió en 1871 – sin descendencia oficial pero dejando una hija adoptiva, (4) al morir su esposa Ángela de León en 1880, hizo un inventario de los bienes del matrimonio y le entregó a sus hijastras Marina y Carmen la parte que les correspondía de su madre y, finalmente, (5) murió en Barcelona en 14 Abril de 1887 dejando en su testamento que se repartiera la fortuna en España entre familares y amistades. Como filántropo Tomás Ribalta y Serra fué uno de los mas grandes de la Sagua Colonial al donar la mayoría del dinero para la construcción y mantenimiento del Hospital “San José” (luego “Pocurull’) y en su testamento dejó 20,000 pesos para obras benéficas en la “Villa del Undoso.”
Carmen “RIBALTA” y León (1841-1900)
Fué una de las dos herederas de la fortuna en Cuba de Tomás Ribalta y Serra – incluyendo el ingenio “Santa Teresa” de donde provinieron los fondos para ayudar a los pobres de la localidad y sus alrededores. Durante la Guerra de Independencia contra España (1895-1898) donó grandes cantidades de dinero a los insurrectos criollos. Benefactora sagüera y mujer dotada de gran espíritu de humildad. En su memoria se puso su nombre a la Calle Carmen Ribalta (ántes Calle Amistad) que comienza en Calle Brito (Este) y termina en Calle Pinto (Oeste). Se casó en 1857 con Juan Bautista de Oña y Pérez de Urría y tuvieron ocho descendientes (6 mujeres y 2 varones) – dos de ellos fueron María de los Ángeles Rosa y Juan de Dios de Oña y Ribalta. Carmen Ribalta murió en Sagua en 2 Abril 1900.María de los Ángeles Rosa de Oña y “RIBALTA” (1859-1920)
Donó un pabellón completo, para atender a los pobres que sufrían de tuberculosis, al Hospital “Pocurull” - previamente conocido por “San José” según mencionamos bajo Tomás Ribalta y Serra. Le confieren el título honorario de Hija Predilecta de Sagua en 10 Febrero 1911.
Juan de Dios de Oña y “RIBALTA” (1868-1916)
La herencia de su padre (fallecido en 1889) le facilitó dar ayuda financiera a los insurgentes mambises que comenzaban a pelear contra España y su madre, Carmen Ribalta, lo sacó de Cuba ya que tenía su vida en peligro - en los registros de Ellis Island aparece arribando en el puerto NY en 1894 rumbo a Barcelona y regresando al puerto NY en 1903. Después de su regreso a Cuba compró el ingenio “Resulta” – propiedad de Don Joaquín Alfonso Madan – donde invirtió grandes sumas de dinero en la compra de tierras, expansión del ferrocarril para acarrear la caña y modernizó la maquinaria industrial. Dedicó gran parte de sus ganancias azucareras a hacer obras importantes en Sagua – (1) benéficas (construyó el “Asilo de Ancianos,” creó la “Fundación Oña-Ribalta” y le dejó 100,000 pesos oro en su testamento, donó la casa para el “Liceo de Sagua,” compró instrumentos de cirugía para el “Dispensario de Niños Pobres”), (2) comunicación (carretera Sagua-Resulta) y (3) urbanas (adquirió el acueducto y mejoró su operación, facilitó la localidad para que se construyera el Reparto Oña). Juan de Dios murió en París en 20 Octubre 1916. En su memoria se puso su nombre a la Calzada de Oña que corre paralela a la antigua Calzada de Jumagua (hoy Calzada de Barker) y se construyó el Parque de Oña.
ARCHIVO SABANEQUE
1970 - 2011